INTERESANTE Y OBTUSO CRONENBERG EN COSMOPOLIS, POCA COSA A DESTACAR EN V/H/S, Y DELICIAS PARA EL PÚBLICO CON THE CABIN IN THE WOODS.
Cosmopolis (David Cronenberg) 2012
No creo que sea una película fácil de juzgar Cosmopolis, para eso harían falta algunas pistas donde agarrarse para formar una opinión. No creo que un director como Cronenberg se haya relajado a la hora de dirigir esta película, pero si es cierto que la ausencia de puesta en escena es muy presente, Cronenberg nos niega la intencionalidad. Su film es aséptico, lleno de verborrea, drama y/o conflicto inexistentes, la ironía (aunque presente) apagada... un sistema en declive a través de los ojos de un broker causante del éxtasis y de la fallida consecuente. Pero Cronenberg parece más interesado en analizar la parte pasiva, la plebeya, la clase media. En medio de todos los discursos intelectofilosóficos permanece un estado de ánimo, un ánimo que es nada o la ausencia de ánimo, esa ciudad silente en constante ebullición pero que se siente como un mundo espectral. Insisto en no querer juzgar la película, necesitaría algo más de reposo, pero de un director que prácticamente no ha fallado nunca no puedo no prestarle respeto a una película que me pone trabas. El cine de Cronenberg es consecuente en su trayectoria. Tras Historia de Violencia era normal que viniese Promesas del Este, y Un Método Peligroso es muy coherente en los anhelos de su nuevo cine. Cosmopolis es un paso más allá, cada vez más cercano a Bresson (sin perder el ADN de Cronenberg), pero que busca en las mínimas expresiones llegar al corazón de lo oculto.
V/H/S (VV.AA.) 2012
Película que se apunta al carro de las filmaciones caseras (desde el punto de vista subjetivo) para hacer terror. Organizada a través de varias piezas de distintos directores, nada a destacar a excepción del primer y el último cortometraje que son con diferencia los mejores y su vez originales y entretenidos. El resto resoplidos y los ojos cansados del día cerrándose a la espera que el próximo cortometraje nos dé algo de alegría. Pero nada, tópicos y falta de imaginación, todo se hace de rogar ofreciendo un final sorpresivo, pero ese giro original no llega en ningún cortometraje y la decepción es creciente. Película que le sienta bien el público de festival, y mucho más el de Sitges, benévolo con el género y hambriento de sangre y muertes originales y brutas. Trataría de comentar algo más pero no creo que su contenido haya tenido mucha más reflexión.
The Cabin In The Woods (Drew Goddard) 2011
Un producto diseñado para un público muy concreto y que acierta de lleno. The Cabin In The Woods tiene como objetivo complacer al espectador medio "freak" y lo logra. Se basa en esa máxima de Robert McKee (gurú del guión estadounidense): "atrápalos con el final". No importa que la película sea buena o mala, si el final es bueno el público es tuyo. Y no es que el final de The Cabin In the Woods sea bueno, es que es cojonudo -creo que es la expresión correcta-. El misterio del primer acto funciona, correcto, el segundo acto se apunta a las modas y pone el piloto automático, algo insulso y cansino, pero llegados a la última media hora empieza la diversión. Le da la vuelta al género, es autoreferencial, irónico, (muy) bien realizado, buenos efectos, sangre como para ahogarte... cine de terror en mayúsculas con el humor como complemento. La gente la comenta, la recomienda... "sí, pero un poco tópica la parte del medio..." "ya, ¡pero el final es buenísimo!". Pues eso, el final es buenísimo, merece la pena solo por eso.
Mañana The Tall Man, Grabbers, Wrong, Caterpillar de Wakamatsu y la polémica The Weight, a ver si es tan polémica.
Cosmopolis (David Cronenberg) 2012
Próstatas, sexo y economía.Un momento
muy Cronenberg en Cosmopolis.
No creo que sea una película fácil de juzgar Cosmopolis, para eso harían falta algunas pistas donde agarrarse para formar una opinión. No creo que un director como Cronenberg se haya relajado a la hora de dirigir esta película, pero si es cierto que la ausencia de puesta en escena es muy presente, Cronenberg nos niega la intencionalidad. Su film es aséptico, lleno de verborrea, drama y/o conflicto inexistentes, la ironía (aunque presente) apagada... un sistema en declive a través de los ojos de un broker causante del éxtasis y de la fallida consecuente. Pero Cronenberg parece más interesado en analizar la parte pasiva, la plebeya, la clase media. En medio de todos los discursos intelectofilosóficos permanece un estado de ánimo, un ánimo que es nada o la ausencia de ánimo, esa ciudad silente en constante ebullición pero que se siente como un mundo espectral. Insisto en no querer juzgar la película, necesitaría algo más de reposo, pero de un director que prácticamente no ha fallado nunca no puedo no prestarle respeto a una película que me pone trabas. El cine de Cronenberg es consecuente en su trayectoria. Tras Historia de Violencia era normal que viniese Promesas del Este, y Un Método Peligroso es muy coherente en los anhelos de su nuevo cine. Cosmopolis es un paso más allá, cada vez más cercano a Bresson (sin perder el ADN de Cronenberg), pero que busca en las mínimas expresiones llegar al corazón de lo oculto.
V/H/S (VV.AA.) 2012
En pocas ocasiones el terror brilla en V/H/S.
Pero el primer cortometraje es muy bueno.
Película que se apunta al carro de las filmaciones caseras (desde el punto de vista subjetivo) para hacer terror. Organizada a través de varias piezas de distintos directores, nada a destacar a excepción del primer y el último cortometraje que son con diferencia los mejores y su vez originales y entretenidos. El resto resoplidos y los ojos cansados del día cerrándose a la espera que el próximo cortometraje nos dé algo de alegría. Pero nada, tópicos y falta de imaginación, todo se hace de rogar ofreciendo un final sorpresivo, pero ese giro original no llega en ningún cortometraje y la decepción es creciente. Película que le sienta bien el público de festival, y mucho más el de Sitges, benévolo con el género y hambriento de sangre y muertes originales y brutas. Trataría de comentar algo más pero no creo que su contenido haya tenido mucha más reflexión.
The Cabin In The Woods (Drew Goddard) 2011
No leáis nada de la historia, no miréis el trailer. Simplemente miradla.
Un producto diseñado para un público muy concreto y que acierta de lleno. The Cabin In The Woods tiene como objetivo complacer al espectador medio "freak" y lo logra. Se basa en esa máxima de Robert McKee (gurú del guión estadounidense): "atrápalos con el final". No importa que la película sea buena o mala, si el final es bueno el público es tuyo. Y no es que el final de The Cabin In the Woods sea bueno, es que es cojonudo -creo que es la expresión correcta-. El misterio del primer acto funciona, correcto, el segundo acto se apunta a las modas y pone el piloto automático, algo insulso y cansino, pero llegados a la última media hora empieza la diversión. Le da la vuelta al género, es autoreferencial, irónico, (muy) bien realizado, buenos efectos, sangre como para ahogarte... cine de terror en mayúsculas con el humor como complemento. La gente la comenta, la recomienda... "sí, pero un poco tópica la parte del medio..." "ya, ¡pero el final es buenísimo!". Pues eso, el final es buenísimo, merece la pena solo por eso.
Mañana The Tall Man, Grabbers, Wrong, Caterpillar de Wakamatsu y la polémica The Weight, a ver si es tan polémica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario